Elimina toxinas, relaja los músculos y restablece el cerebro.
La inmersión en agua fría es una terapia ancestral con múltiples beneficios para la salud física y mental. En solo unos minutos, activará el sistema nervioso autónomo y ayudará en la reducción de la inflamación de tejidos, facilitando un sistema inmunológico fortalecido, niveles hormonales equilibrados, una mejor calidad del sueño y la producción de endorfinas; las sustancias químicas del cerebro que naturalmente elevan tu estado de ánimo.
Algunos beneficios de este ritual:
La experiencia inicia con un baño purificador y energizante en sales minerales y hielo. Finalizando con un masaje corporal vigoroso y energético de tejido profundo.